Valladolid es un destino muy interesante por su historia y patrimonio monumental que comprueban la excelencia cultural de este destino.
En el Casco Antiguo sobresale la inacabada Catedral del siglo XVI, que es conocida como “La Inconclusa”. La Catedral también alberga el Museo Diocesano y Catedralicio y su Torre ofrece vistas sobre la ciudad.
Otros monumentos de interés religioso de Valladolid son las iglesias de Santa María la Antigua, de Santiago, de San Pablo, de San Benito y de San Miguel.
La Plaza Mayor  es una de las más grandes de España y un paraje en ese lugar es imprescindible. La estatua del Conde Ansúrez se encuentra centrada en la plaza cuya estructura ha sido copiada en ciudades como Madrid.
En el centro de la ciudad se puede encontrar un paisaje verde en Campo Grande, un parque urbano creado a finales del siglo XVIII. El parque posee una pequeña cascada, una grande variedad de árboles y pavos reales. Junto al Parque Campo Grande se encuentra la Academia de Caballería de Valladolid.
La Cúpula del Milenio, creada como uno de los pabellones de la Expo de Zaragoza, es un espacio a visitar junto al río Pisuerga.
Valladolid se caracteriza por sus varios museos, como el Museo Patio Herreriano de Arte Contemporáneo Español, el Museo de La Ciencia y el Museo de Valladolid que se divide en las secciones de Arqueología y Bellas Artes. Entre otros museos se destaca la Casa Museo Colón,  que rememora la vida de Cristóbal Colón y exhibe diversas piezas y documentos relacionados con el descubrimiento de América, y el Museo Nacional de Escultura que ocupa el Colegio de San Gregorio de Valladolid, uno de los mejores ejemplos de la arquitectura del periodo de los Reyes Católicos.

La gastronomía vallisoletana expresa los sabores de la cocina castellana y ofrece deliciosas recetas de platos fuertes compuestos por verduras, hortalizas, embutidos y carnes.
Fundamentada en los asados, el Lechazo Asado y el Cochinillo Asado  son platos típicos de Valladolid. Los Espárragos de Tudela de Duero, las Patatas  a la Importancia y la Sopa de Ajo son especialidades de la región.
Valladolid posee productos de calidad y tradición como la gran variedad de pan, el queso  de Villalón, el Ajo Arrieros y las Salchichas de Zaratán.
Ejemplos de la repostería  que se puede degustar en Valladolid son la Bolla de Chicharrones, las Rosquillas de Palo, las Mariquitas, los Roscos de Yema, los Bizcochos de Santa Clara (Tordesillas), Almendras Garapiñadas,  el Arroz con Leche y los Mantecados de Portillo que son también conocidos como Portillanos y Zapatillas.
El pequeño recorrido por la gastronomía vallisoletana termina con la presentación de los vinos de gran calidad como son los vinculados a las denominaciones de origen de la provincia vallisoletana: los tintos de la Denominación de Origen Ribera del Duero, los blancos de Rueda o los rosados de la Denominación de Origen Cigales.

Valladolid también es denominada “Pucela”.
En 1527 nació en el Palacio de Pimentel de  Valladolid el futuro rey Felipe II.
En el Palacio de los Vivero se casaron los Reyes Católicos.
Miguel de Cervantes vivió en Valladolid entre los años 1604 y 1606.
Valladolid fue, entre 1601 y 1606, capital del Imperio español.
Cristóbal Colón, famoso por haber realizado el descubrimiento de América, murió en Valladolid, en el año de 1506.
En la Catedral de Valladolid se encuentra enterrado el Conde Ansúrez, considerado el fundador de Valladolid.
José Zorrilla fue un importante poeta y dramaturgo Vallisoletano.
La Semana Santa es el evento cultural más importante de la ciudad y fue declarada de Interés Turístico Internacional en 1980.
Valladolid es la ciudad anfitriona del Concurso Nacional de Pinchos y Tapas, el único que se realiza en España.
El Palacio Real fue la sede de la corte española de principios del siglo XVII.
La denominación de origen con mayor valor turístico es la de la Ribera del Duero.